El agua se volvió negra. El cielo se cubrió de una capa de nubes oscuras. A lo lejos los niños vieron relámpagos acuchillando el mar. Empezó a llover.
 

Una voz habló por el altavoz.  

Niní y Gusi volvieron al comedor a encontrarse con su papá. 

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El barco atravesó la tormenta y llegó al puerto. En la isla el cielo era púrpura, ya no llovía. La familia desembarcó y tomó un taxi hasta el hotel, bordeando la playa.

Mientras viajaban, los niños desplegaron el mapa de la Isla de los Muertos. 
Al sur, las cuevas de caliza donde nadaban los peces ciegos. 

Al norte, el parque de diversiones. 

En la playa, los enamorados.